miércoles, 8 de septiembre de 2010

Influencias V: Steampunk


A raíz del proyecto que me traigo ahora mismo entre manos, voy a aprovechar para hablar sobre un elemento de reiterada aparición en mis universos de ficción: el Steampunk.

Haciendo memoria, supongo que mi primer contacto con el género fue la serie de "Sherlock Holmes" realizada por Hayao Miyazaki. Probablemente también sea uno de tantos que admiraba a Moriarty y deseaba verle aparecer en cada capítulo. Las alocadas máquinas que desarrollaba para llevar a cabo sus crímenes tuvieron mucha culpa en esa primera fascinación y, desde luego, me crearon el gusto actual por la época victoriana: ese momento de la historia en el que cualquiera con un poco de imaginación, muchos tubos, tuercas y una caldera, podía acabar creando una máquina nunca antes vista.



Después de esa experiencia cuasi adolescente, pasó tiempo antes de ascender por el siguiente escalón del mundo steampunk: "Nadia, el misterio de la piedra azul". Con esa serie de anime pasé al nivel de la era victoriana "inverosímil". De pronto, el final del siglo XIX estaba poblado por herederos de estirpes mitológicas y la tecnología se basaba en fuentes de energías capaces de desafiar a las del siglo XX. Pero, sobre todo, introdujo en mi imaginario un elemento que me fascinó: los motores antigravedad y las máquinas gigantes capaces de volar. Quien haya leído "El secreto de los dioses olvidados" tendrá muy claro que esta fascinación está más que demostrada.

Influencias posteriores llegaron a través del rol, donde el uso de tecnologías anacrónicas y de corte fantasioso fueron enriqueciendo estas referencias. Sobre todo, elementos de Los Mitos de Cthulhu, Warhammer y Shadowrun.

Las últimas fuentes que me han inspirado tuvieron un origen más variado. La más importante quizá sea "La liga de los hombres extraordinarios" de Alan Moore. Y su relevancia radica en que es una obra con una trama más adulta, con personajes que me eran conocidos pero aparecían reinterpretados en versiones más "oscuras" de sí mismos. Y como cada personaje (Nemo, Quatermain, Mina Harker, Jekyll...) añadía su propio granito Steampunk a la ambientación, la combinación resultante reunió lo más fantástico de esos mundos. El universo creado por Alan Moore era una mezcla envidiable de ciencia adelantada a su tiempo y criaturas sobrenaturales que aún aspiro a igualar.



En el apartado literario, la "Trilogía del Inquisidor Eisenhorn" me ha servido para incorporar nuevas y buenas ideas. No quiero extenderme mucho, pero la ambientación del universo Warhammer 40.000 probablemente sea la más rica y poderosa que conozco. Y tiene un toque retro-futurista que lo coloca casi en el plano de lo Steampunk, con sus máquinas de funcionamiento inexplicable y el terrible poder de los seres de naturaleza inhumana que pululan por él. Y en concreto, el Inquisidor Eisenhorn y su historia te trasportan por lugares inverosílmente oscuros a la par que grandiosos (o decadentes).



La última referencia a la que voy a hacer mención es un videojuego: "Arcanum". el encanto principal del mismo radicaba en su ambientación, situada en un siglo XIX poblado de criaturas mágicas como elfos, enanos o trolls (los jugadores de rol me entenderán si lo defino como una versión retro de Shadowrun). El juego en sí no tuvo más repercusión, creo yo, porque apareció en el momento en que los juegos On-Line estaban en plena ebullición y, comparado con aquellos que exprimían ese formato de juego, el producto era pobre. Pero ofrecía al jugador un enorme mundo por explorar, misiones innumerables con las que obtener gloria, y la posibilidad de desarrollar a su personaje en base al uso de los poderes arcanos o la simple y fiable tecnología. Yo aún conservo mi copia y todas las notas sobre cómo funcionaba cada aspecto del juego, aunque debo reconocer que abandoné en el momento en que me vi perdido dentro de las numerosas tramas que me habían presentado.

Sé que me debo de haber dejado algún dato en el tintero, pero confío en haber mencionado los más importantes. Desde luego, a los aficionados a la ficción que hayan descubierto un libro, un cómic o un ánime, les recomiendo que se hagan con un ejemplar y los disfruten. Yo, por mi parte, espero poder aportar en breve un bonito grano de arena al género.

2 comentarios:

  1. Hola,
    Pues no había caído en esas influencias al leer tu novela. Pero sí, ahora soy capaz de reconocerlas, aunque a posteriori.
    Lo retro-futurista realmente despierta mi imaginación como pocas cosas, como los cómics de Enki Bilal.
    Saludos.

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  2. Ciertamente, es complicado saber de dónde exactamente ha extraído un autor cierta referencia si él mismo no te encamina (o en los casos en que se "homenajea" de forma demasiado literal la obra que ha influenciado).
    Pero bueno, así te puedes entretener hurgando en la trama y los elementos para identificar el origen de la idea...
    Saludos, Igor.

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