miércoles, 15 de abril de 2015

La hora de mis cuentos "huérfanos"

Supongo que llamar huérfanos a unos cuentos es una forma un tanto extraña de clasificarlos, ya que la paternidad de los mismos está clara y aún (toco madera) no he dejado este mundo. Sin embargo, me quería referir más bien a una falta de "padrino" con los que presentarlos a la sociedad.

El hecho es que, desde el año 2013, he estado buscando una editorial a la que le interesara publicar una serie de relatos que había empezado a escribir unos dos años antes. Una labor bastante ingrata porque parecía imposible obtener una respuesta positiva, a la que además se acabaron añadiendo los comentarios de algunas personas que me venían a decir que "esa temática no interesa actualmente" (donde "interesa" debería sustituirse por "vende" para ser más exactos), de modo que la autoedición empezó a ganar más y más fuerza como mi única opción.

¿Y cuál es la temática de los relatos? Pues revisitar los cuentos clásicos infantiles. En principio no parece que sea un tema muy de mi estilo, más dado a la épica y la ciencia ficción, y de hecho mi único interés por ellos se había reducido a disfrutar con el trabajo de actualización/revisión que habían estado llevando a cabo en series como Once Upon a Time o en los cómics de Fábulas. Incluso ahora, si me preguntasen, ignoro qué clase de influencia pudieron tener esas obras para hacer que los cuentos clásicos empezaran a pulular por mi cabeza. Pero el caso es que, a mediados de 2012, me olvidé de todos los proyectos que tenía sobre la mesa y me centré única y exclusivamente en esos personajes a los que había dejado muy atrás en mi infancia.

(ilustración de Zdzislaw Beksinski)

Perdonad si no me extiendo mucho en explicar el proceso creativo y cómo me planteé la realización de los cuentos, pero eso lo he dejado para la introducción del libro. Porque, y esa es la noticia que quiero presentar, tras años esperando que alguna editorial le diera el Ok a mi propuesta, decidí que no me apetecía seguir aguardando a que "la temática volviera a interesar". Así que me embarqué en la tarea de autoeditarme. Y como primer paso, el otoño pasado busqué a un nutrido grupo de lectores en el foro Abretelibro! para que me hicieran una crítica lo más honesta posible y, así, sacar a la luz todos los posibles defectos que se me hubieran escapado hasta entonces.

El resultado final de sus comentarios va a ver la luz muy pronto, bajo el título de Ni colorín, ni colorado, en el cual presentaré dieciséis relatos inspirados por otros tantos personajes de cuentos infantiles (Peter Pan, la Sirenita, Pinocho, Mowgli, el Sastrecillo Valiente...). Y, si la fortuna quiere aliarse conmigo, espero que sean del agrado de todos aquellos que se han entretenido hasta ahora con  Fábulas, Érase una vez..., Grimm, Merlin, y todas esas películas que están reinterpretando a los personajes de cuentos (y cuyo éxito, en mi fuero interno, me había convencido de que mis relatos podían tener un público más que evidente).

De momento, eso es todo. Dentro de poco os haré la presentación formal, con más información sobre los contenidos y dónde conseguir el libro.

Un saludo para todos.




2 comentarios: